Riópar, aquí donde nace el Mundo

Riópar es un municipio con 1.400 habitantes, aproximadamente, ubicado en un lugar privilegiado entre las Sierras del Segura y de Alcaraz, poco más de 100 km lo distancian de su capital albaceteña.

Formó parte del señorío de las cinco Villas junto con Villapalacios, Bienservida, Villaverde de Guadalimar y Cotillas.

Consta de dos partes distanciadas varios kilómetros:

Riópar Viejo es su casco histórico, asentado sobre el antiguo Rivus Oppae,  de él emerge  su iglesia del Espíritu Santo, con partes diferenciadas de distintas épocas, su útima reconstrucción data del siglo XV; tras las paredes encaladas de su altar  se descubrieron importantes frescos a finales del siglo pasado.

En lo más alto de este enclave y para completar el conjunto Histórico, yacen los restos de su castillo medieval junto al cementerio

Desde que Juan Jorge Graubner fundara las Reales Fábricas de San Juan de Alcaraz a finales del siglo XVIII este pueblo empezó a ser víctima de la despoblación, sus gentes poco a poco se mudarían a Fábricas de Riópar, en busca de un sustento proporcionado por una economía más moderna basado en la industralización.

Riópar, anteriormente llamado Fábricas de Riópar, es el resultado de un proyecto de colonización llevado a cabo por Carlos III en 1772. El establecimiento de mineros e industriales bajo las órdenes de Juan Jorge Graubner  dió origen a este asentamiento.

Actualmente, la principal actividad económica del pueblo es el turismo rural, con una elaborada infraestructura de establecimientos hosteleros y extrahoteleros donde poder dormir y degustar los ricos platos de la gastronomía serrana.

Riópar ofrece Sierras con paisajes naturales y atractivos culturales que nos harán retroceder en el tiempo. Sus principales atractivos  son el Parque Natural del Nacimiento del Rio Mundo, las antiguas Fábricas de bronce y Riópar Viejo, aunque no debemos pasar por alto su proximidad a la población artística y monumental de Alcaraz.

En este municipio la economía fue impulsada en antaño por la metalurgia, basada en una minería local de calamina para la obtención de cinc y cobre usados para las fundiciones de latón y bronce.

Esta industria data de 1772 cuando, por autorización del rey Carlos III al ingeniero austriaco Juan Jorge Graubner, se otorga la construcción e instalaciones de una factoría para la elaboración de latón, conocidas como las Reales Fábricas de San Juan de Alcaraz. Para su ubicación, se eligió un paraje junto a un curso de agua abundante, donde los recursos naturales de materia prima, agua, madera y calamina eran abundantes. Esta ferrería fue la primera manufactura española y la segunda europea en latón y bronce, tras la de Gosslar en Alemania de la que, al contrario de la de Riópar, ya no quedan restos.

A finales del siglo XIX la Mina de Calamina pierde rentabilidad, las fábricas entran en regresión y tras algunos esfuerzos por su mantenimiento y recuperación por empresas privadas, cierran definitivamente en 1993. En la actualidad se mantiene la vieja tradición a través de la fabricación y venta de sus famosos artículos decorativos, lámparas y muebles de bronce, como principal mercado de menaje rústico tradicional y como souvenirs.

para los que eligen la montaña…

deporte

Sumérgete en un mar de montañas perfectas para la práctica del deporte.

Senderismo, escalada, mountain bike, bici en ruta… Todo lo que puedas imaginar en el punto donde se tocan las Sierras de Segura y Alcaraz.

Practica el ciclismo de carretera por altas montañas  y lugares donde no llega el ruido, accesos serpenteantes  cruzan pueblos tan pequeños que duran un parpadeo; puedes saltar en pocos minutos al suelo andaluz, comunidad con la que Castilla La Mancha comparte la cuenca del rio  Segura.

Recorre a pie o en bici la amplia red de senderos serranos y pasa el día entero entre bosques de pinos salpicados de infinitas especies florales y faunísticas.

Hay opciones distintas. Para personas distintas.

Senderismo por la red de caminos reales

Para curiosos con ganas de olvidar las prisas. Haciendo deporte sin dejar de mirar todo lo que esconde la naturaleza del Parque Natural de los Calares del Río Mundo y de la Sima.

Rutas y paisajes cambiantes para los amantes de la bici y marchas a pie

Para los deportistas con carácter fuerte, el Calar del Mundo ofrece un catálogo completo de rocosas y empinadas cuestas, paisajes diversos en función de la época del año.

Adrenalina para los amantes de la mountain bike

Hay mil caminos llenos de vericuetos. Para que los más nerviosos puedan hacer deporte a toda velocidad, pero rodeados de un clima tranquilo. Haz clic aquí para más información sobre el Club BBT de Riópar

Espeleología para los que quieren ver más allá del paisaje

La enorme cueva de Los Chorros, Nacimiento del Río Mundo, con sus más de 38 km de galerías no lineales exploradas, permite que descubramos sus secretos en ella en algunas épocas del año.

Piragüismo para los que les gusta mojarse

Los diferentes tramos del río Segura  nos permitirán disfrutar de las diferentes modalidades de este deporte, desde el rafting hasta las aguas calmadas.

Barranquismo para los que buscan emociones fuertes

Los parajes inigualables y barrancos acuáticos escondidos en el seno de las montañas ofrecen experiencias emocionantes y sorprendentes.

Escalada para los más osados

Los que necesitan superar retos las Sierras del Segura y Alcaraz esconden una rica oferta de escenarios verticales, desafíos que sólo los locos por la escalada aciertan a entender.

Pesca deportiva

Numerosas zonas autorizadas en medio de parajes indescriptibles suponen un caramelo fluvial para los que prefieren un deporte tranquilo.

Paintball para los que buscan diversión

La oreografía de nuestros parajes naturales ofrece parapetos, búnkeres y torres donde escondernos y dar rienda suelta a la imaginación para organizar nuestra estrategia.

PatiodelasFlores